La cantante española, cuyo nombre real es María Rodríguez Garrido, actuará mañana en el Plaza Condesa
CIUDAD DE MÉXICO, 27 de agosto.- Con la Mala Rodríguez no hay espacio para las dudas. La española habla claro y de frente, sin tapujos. Quizá sea la herencia que le ha dejado su paso por el mundo del rap, género que la lanzó a la fama o quizá sea esa personalidad españolísima que no disimula.
Previo a su visita a México, donde ofrecerá mañana un concierto en El Plaza Condesa, la Mala pide que a ella no le cuelguen protestas sociales o reclamos a los gobiernos de ninguna parte del mundo.
“Lo mío no es la canción de protesta, nunca lo ha sido. Lo único que hago es plasmar mis ideas y pensamientos en mis canciones, pero eso no quiere decir que yo pida a la gente hacer tal o cual cosa”, indicó, desde Madrid, María Rodríguez Garrido, nombre real de la cantante.
Se defiende la española de algunas revisiones que se han hecho de Bruja, su más reciente disco de estudio, al que catalogan como el más incendiario de una carrera que ya acumula cinco álbumes.
“Cada una de las canciones de este disco tiene varias lecturas porque disfruto mucho darles esa libertad, me gusta pensar en las letras como un caleidoscopio en el que te puedes reflejar sin importar desde qué ángulo veas, ya sea social o personal”, apuntó María.
Coquetea con el pop, el rock y hasta el reggae
El disco, en el quela intérprete ha coquetado con el pop, el rock, el rap y hasta el reggae, es, eso sí, uno de los más ambiciosos que ha realizado aunque, curiosamente, ese nunca fue el plan original.
“Ha sido quizá el disco más órganico que he hecho pues todo ha salido muy natural, sin pretensiones ni metas claras. Al no haber buscado nada me di cuenta de que era algo libre, que me permitía buscar ritmos nuevos, con más cadencia. Cuando las cosas suceden así no hay que darle más vueltas”, expresó la cantante.
Sobre su reencuentro con el público mexicano, que la disfrutó por última vez en la pasada edición del festival Vive Latino, la española confesó sentirse emocionada por actuar ante uno de los públicos más intensos.
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